Romance de Baldomera (por Pepe da Rosa)

Les voy a contar a ustedes
más de broma que de veras,
la historia de una muchacha
que se quiso hacer toreeeeeeeeeeeeeeeera.

El padre no daba golpe.
La madre no trabajaba.
Y un hermano que tenía,
ni soñando la doblaaaaaaaaaaaaaaaaba.

Baldomera se hizo grande,
guapa, sana, hecha una pera,
no se puede estar mejor,
la madre que la parió,
como estaba Baldomeeeeeeeeeeeeeeeeeera.

Un apoderado la vio
y la quiso hacer torera:
Una casa le compró,
la vistió de mil maneras
y Baldomera tragó
porque así es que trago yo
y así es que traga cualquieeeeeeeeeeeeeeeeera.

Con idea de probarla
se fueron a un tentadero,
y se llevó por tentarla
el desengaño primeeeeeeeeeeeeeeeeero.

Un guantazo le arreó
que se le cayó el sombrero,
porque se habló de tentar
y una cosa es torear
y otra cosa un tentadeeeeeeeeeeeeeeeero.

Por fin pudo debutar
la guapa de Baldomera
y convertir en realidad
su sueño de ser toreeeeeeeeeeeeeeeeeeera.

Y en su primera corrida,
va a torear con Currito,
diestro de gran valentía,
torero macho y boniiiiiiiiiiiiiiiiiito.

Currito de verde y oro
se prenda de Baldomera,
y en vez de arrimarse al toro,
va y se arrima a la terneeeeeeeeeeeeeeeeeeera.

El apoderado celoso
le forma la pelotera,
diciendo que ligue al toro
y no ligue a la toreeeeeeeeeeeeeeeeeeeera.

Currito quiere hacer caso
y le da medio atontado
al toro seis muletazos
y dos al apoderaaaaaaaaaaaaaaaaaaado.

El apoderado se pica
y allí se forma el desmadre
porque dice con razón
que le dé el pase a su paaaaaaaaaaaaaaaaaadre.

A esto viene el empresario
frenético a dar las quejas,
y sin cuadrarlo siquiera,
nerviosita Baldomera
le corta las dos oreeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeejas.

El toro entonces arremete
viendo clara la ocasión,
y a Curro de un achuchón
lo manda al tendido sieeeeeeeeeeeeeeeeeeeeete.

Se desmaya Baldomera
y van para la enfermería
Currito con la cogida,
apoderado y torera
y detrás el empresario,
mientras la banda del pueblo
va tocando El Relicaaaaaaaaaaaaaaaaaaaario.

Y aquí termina la historia
de aquella mujer torera
que no toreaba bien,
pero estaba como un tren
y se llamó Baldomeeeeeeeeeeeeeeeeeeeera.

 

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